Mi fiel esclavo Sergio publicó por órdenes mías su experiencia en nuestro reencuentro después de mi paréntesis profesional en mi vuelta a la escena BDSM.
Sergio lo ha publicado en SexoMercado para mostrar su agradecimiento por volver a sentir mi Autoridad sobre su alma y cuerpo.
Mi experiencia en mi reencuentro con Mi Dueña
La llegada a la mazmorra fue una vuelta a mi realidad como sumiso que he sido de la Dueña que pertenezco en propiedad: Dominatrix Venus
Explico esta experiencia pues es una orden de mi Dómina para mostrar a los sumisos de Barcelona que debemos de estar agradecidos al volver a gozar de su Autoridad.
Los que no pasaron por sus manos deben saber que los pactos de sesión los cumple totalmente lo que permite realizar una fantasia auténtica. Su presencia femenina puede llenar las necesidades más fetish del más osado fetichista.
Mi sesión se inició con la entrega del tributo en una bandeja cogida con pinzas en los pezones como siempre acordamos. Me abofeteó mientras recitaba la oración de la entrega de su dinero. Ese ritual es fantástico pues muestra el grado de entrega del sumiso. Da mucho de sí: en sesiones anteriores se meo el tributo y me tocaba limpiárselo.
Poco después pasamos a adorar sus pies y zapatos de talón y charol mientras me castigaba el culo, pies, pezones con pinzas metálicas y los genitales bien atados. Hubo éxtasis a sus pies mientras observaba mi trabajo de limpieza en el suelo.
Según lo pactado paso a pasear a su perro esclavo – servidor- buscando primero huesos y entregándolos a su mano con delicada manicura recibiendo bofetadas por tardar y escupitajos que tragaba con delicia. Me puso delante de un espejo para ver mi degradación a perro sumiso que busca un hueso que roer.
Convenimos que me poseía con una larga verga y mientras me follaba dos cascabeles pinzados en los pezones ponían música a cada embestida de Mi Dómina. Subido a un potro me follo a gusto mientras me calentaba el culo a azotes insultándome mi posición de putita
Después de poseerme el culo paso a marcarme con su orín que es su especialidad. Una humillación que conlleva oler a Tu Dueña. Con un artilugio de la sala a modo de water con las paredes transparentes de plástico, Mi Mistress Venus se sento en la repisa para usarme de WC-humano. Fue especialmente lasciva y cruel ver esa imagen de un culo de Diosa que añade un embudo para que no se pierda ni una gota del champan de esclavo. Auténtico. 2 minutos de lluvia que entraron sin parar en mi cuerpo sin derramar una gota porqué entonces el castigo seria de campeonato. Es cruel y sabe ponerte el culo bien rojo hasta lo pactado.
Dos gotas de orín salidas de la boca fueron suficiente motivo de castigo atado a las argollas.
La sesión acabo con Mi Dueña tendida en sofa-cama estirada como una Diosa mientras observaba el trabajo obligado de adorar sus pies, me los metia enteros en la boca debiendo pasar la lengua por cada uno, y luego adorar sus inacabables piernas.
Me negó la corrida. Suele ser un juego pactado muy excitante. Por la noche le envio una imagen de mi corrida sobre un papel blanco que dice cuanto de agradecido soy por ser esclavo. La negación de orgasmo forma parte de la relación D/s. Y Dómina Venus tiene ese poder sobre mí, sobre mi vida sexual- Mi contrato de esclavitud que incluye la castidad forzada, “palabra de honor“. SIn consentimiento de Diosa Venus no hay orgasmo y ella sabe que no puedo mentir pues lo nota.
De hecho, el anterior período de esclavitud hasta que se retiro momentáneamente estuve atado con ella con ese contrato firmado por ambos. Libertad ninguna, todo el día pensando en Mi Diosa VENUS. Imposible escaparse ni lo deseo, quiero ser esclavo fiel de está Mujer mandona y autoritaria.
Mi Dómina me ha pedido escribir este tema para satisfacer su ego con mi sumisión.
FUENTE de la experiencia D/s: SexoMercadoBCN